Estimados usuarios, en esta oportunidad quiero compartir con todos un material maravilloso para aprovechar en nuestra tarea de educar para la paz: "La Caja de Herramientas en Educación para la Paz", forma parte de las acciones que este programa realiza en las comunidades indígenas del norte de Chiapas, en colaboración con la Secretaría de Educación de Chiapas, la Dirección de Educación Indígena de Chiapas y la Dirección General de Educación Indígena, con la participación de distintos grupos de maestros, de la sociedad organizada y de la Universidad Iberoamericana.
Los componentes de esta caja forman un sistema en el que cada elemento tiene sus propios fines y todos los elementos, reunidos y vinculados, buscan un mismo fin compartido: ofrecer materiales lúdico educativos que propicien la reflexión introspectiva, el mejor conocimiento del otro y del entorno, el estudio colaborativo, la participación de distintos agentes de la comunidad en apoyo a los maestros, el uso de las lenguas maternas y la identificación de recursos, saberes, talentos y habilidades en las comunidades locales. Particularmente, revisé el material y me pareció muy interesante.
Les dejo el link a través del cual pueden acceder a la Caja de Herramientas
Entre otras cosas, encontramos en sus páginas expresiones como:
"El trabajo con maestros y distintos actores de la vida comunitaria es sin duda alguna una manera idónea de romper el círculo vicioso que engendra y produce ignorancia y pobreza cultural y, derivado de ellas, discrepancias, conflictos irresolubles y violencia".
"En las comunidades, las maestras y los maestros pueden jugar un importante papel en la construcción de una cultura de paz".
Definitivamente, estoy convencida que es nuestra función como docentes fungir como mediadores en la construcción de aprendizajes y conocimientos, pero también
lo es ser promotores y formadores en valores humanos, pues éstos últimos ciñen
al desarrollo personal como base profesional
de sus alumnos.
De
todas las profesiones la del maestro es la que exige una mayor responsabilidad
social y humana. La relación que se establece entre estudiante y maestro puede
ser definitiva para la conformación del carácter de las nuevas generaciones.
Más allá del contrato laboral, el maestro tiene el imperativo moral de trabajar
en favor de cada uno de los seres humanos que están a su cargo y, de esta
manera, contribuir al bienestar social. La formación en valores exige al
docente un continuo trabajo personal que lo conduce a su realización personal.
Para reflexionar y compartir...
•Es
preciso considera que la problemática que aqueja a los niños, niñas y jóvenes
sobre la ausencia de valores universales se debe en algunos casos a la
formación que se les da en su familia. La violencia intrafamiliar, abuso
sexual, maltrato psicológico y otros aspectos relacionados con este rubro, son
algunos ejemplos de factores que influyen en la personalidad del menor. Dice un gran amigo, Óscar Misle, investigador dedicado a promover la convivencia y el buen trato en las escuelas que: "Un niño, niña o joven que se siente abandonado e invisible en su casa, busca la manera de hacerse visible en la escuela, a través de comportamiento agresivos...".
•¿Qué
tan importante es difundir los valores teniendo como ejemplo a nuestra
persona?. El docente debe asumir su papel como
formador y cumplir con un proceso de autoevaluación permanente. Es necesario que realice una revisión de sus aficiones, costumbres, lenguaje y diversos aspectos que integran su
personalidad, para determinar sus propios valores y ejemplificarlos delante de sus alumnos.
•Para
transmitir valores con eficacia se considera que debe haber una empatía entre
el alumno y el docente, y precisamente esta surge a partir de la actitud del
profesor.
•¿Que
competencias docentes considera usted debería reforzar para mejorar su
desempeño como formador de valores?
•Imaginemos
que un catedrático suprime su imagen tradicional de represor e intransigente y
se convierte en un amigo que trata de ayudar a sus semejantes. ¿No sería más
factible?
No se trata de reducirse al nivel intelectual de un alumno, sino de comprender sus problemas, sus aficiones, de identificar sus vocaciones, sus inquietudes y preocupaciones.
No se trata de reducirse al nivel intelectual de un alumno, sino de comprender sus problemas, sus aficiones, de identificar sus vocaciones, sus inquietudes y preocupaciones.
Hasta la próxima....