La época decembrina trae consigo la Navidad, con ella, los recuerdos, las añoranzas, la emoción de los regalos, del compartir con la familia y con los amigos; pero también constituye una ocasión para la oración, la reflexión, el acercamiento, la generosidad, la integración y el pensamiento profundo en nuevas promesas de mejorar nuestras vidas y la de nuestros semejantes.
Siendo que el Nacimiento de Jesús es un acontecimiento histórico que acompaña a todas nuestras familias, es una celebración que nos invita a la introspección y a la reflexión acerca de nuestras acciones; por ello, es una época propicia para hacer un espacio para compartir con nuestros niños y niñas y realizar la lectura de cuentos que narren la historia maravillosa de la vida y obra de ese gran Hombre llamado Jesús. Con nuestros niños y niñas, podemos conversar y compartir el valor y el verdadero significado de la Navidad, para lo cual seria muy pertinente aprovechar el mensaje del Papa Francisco cuando expresó:
"Navidad eres tú, cuando decides nacer de nuevo cada día y dejar entrar a Dios en tu alma. El pino de Navidad eres tú, cuando resistes vigoroso a los vientos y dificultades de la vida. Los adornos de Navidad eres tú, cuando tus virtudes son colores que adornan tu vida. La campana de Navidad eres tú, cuando llamas, congregas y buscas unir. Eres también luz de Navidad, cuando iluminas con tu vida el camino de los demás con la bondad, la paciencia, alegría y la generosidad.
Los ángeles de Navidad eres tú, cuando cantas al mundo un mensaje de paz, de justicia y de amor. La estrella de Navidad eres tú, cuando conduces a alguien al encuentro con el Señor. Eres también los reyes Magos, cuando das lo mejor que tienes sin importar a quien. La música de Navidad eres tú cuando conquistas la armonía dentro de ti. El regalo de Navidad eres tú, cuando eres de verdad amigo y hermano de todo ser humano. La tarjeta de Navidad eres tú, cuando la bondad está escrita en tus manos. La felicitación de Navidad eres tú, cuando perdonas y reestableces la paz, aun cuando sufras. La cena de Navidad eres tú, cuando sacias de pan y de esperanza al pobre que está a tu lado. Tú eres, sí, la noche de Navidad, cuando humilde y consciente, recibes en el silencio de la noche al Salvador del mundo sin ruidos ni grandes celebraciones; tú eres sonrisa de confianza y de ternura, en la paz interior de una Navidad perenne que establece el Reino dentro de ti. Una muy Feliz Navidad para todos los que se parecen a la Navidad". Papa Francisco, 2014.
Les dejo un cuento hermoso con el cual podemos promover una tertulia para la reflexión con nuestros niños y niñas acerca de los valores que debemos resaltar en La Navidad: el amor, la paz, el respeto a los otros, a las diferencias, la solidaridad, la fe, entre otros.El cuento "El Portal de Belén":
Un 24 de diciembre, María y José iban camino de Belén para empadronarse tal y como había ordenado César Augusto. José iba caminando y María, a punto de dar a luz a su hijo,iba sentaba en un burro.
Meses atrás, el arcángel Gabriel había visitado a María para darle la noticia de que en su vientre llevaba al hijo de Dios, un niño al que tendría que llamar Jesús.
A su llegada a Belén, María y José buscaron un lugar para alojarse, pero llegaron demasiado tarde y todo estaba completo. Finalmente, un buen señor les prestó su establo para que pasaran la noche.
José juntó paja e hizo una cama para su esposa. Lo que ninguno de los dos imaginaba antes de trasladarse ese día a Belén, es que en esel momento iba a ncer Jesús.
Al caer la noche, en el cielo nació una estrella que iluminaba más que las demás y se situó encima del lugar donde se encontraba el niño.
Muy lejos de allí, en Oriente, tres sabios astrólogos llamados Melchor, Gaspar y Baltasar, sabían que esa estrella significaba que un nuevo rey estaba a punto de nacer.
Los tres sabios, a los que conocemos como Los Tres Reyes Magos, fueron siguiendo la brillante estrella hasta el pesebre de Belén para visitar a Jesús.
Cuando llegaron a su destino, Melchor, Gaspar y Baltasar buscaron el pesebre y le regalaron al Niño oro, incienso y mirra....
Con ese hermoso cuento, recordamos que es un tiempo para fortalecer nuestra fe y crear lazos de solidaridad y de fraternidad, para abrir caminos de justicia y perdón que nos ayude a vivir una vida mejor fundada en el amor, para consolidar a la familia como futuro y esperanza de la humanidad...
Hasta el próximo encuentro...!! Un abrazo y Feliz Navidad!!
No hay comentarios:
Publicar un comentario